Paso de Misterio

El actual paso de Cristo de nuestra Hermandad, es una talla de estilo neobarroco de Antonio Ibáñez Valles y Joaquín Pineda Fernández, siendo estrenado el Jueves Santo de 1992 y ejecutado sobre una parihuela de 4,20 metros de largo por 2,40 de ancho para treinta y cinco costaleros.

 

 

 

 

En los relieves de las cartelas superiores situadas en la canastilla, se encuentran representados los cuatro evangelistas en cuatro cartelas auxiliares, y los cuatro momentos de la pasión del Señor que escenifican las restantes cuatro Hermandades de Penitencia de nuestra localidad que existían hasta entonces, es decir, la Sagrada y Triunfal entrada en Jerusalén, la crucifixión, la calle de la Amargura, y el descendimiento, obras todas ellas de nuestro hermano escultor,  Antonio Gavira Alba . En cada esquina del canasto sobre un arbotante, se posa un arcángel obra el escultor Juan Ventura.

 

Lo más destacable de todo el conjunto son sin duda los respiraderos, en cuyas cartelas además del escudo de la Hermandad y del escudo de nuestra villa, se encuentran representados los escudos de las cuatro Hermandades de Penitencia que existían hasta entonces (Borriquita, Jesús, Vera Cruz y Soledad), además de las del Cristo de la Cárcel y de la Virgen de los Remedios. En las cartelas de esquina se encuentran tallados atributos de la pasión, tales como el gallo de las negaciones de San Pedro, los dados con los que los soldados se sortearon las vestiduras del Señor, las monedas de la traición de Judas y las tenazas y el martillo. Cuenta además con cuatro maniguetas.

Tanto la canastilla como los respiraderos están rodeados de cabezas de querubines. Su dorado y policromado se debe al taller de «Manolo y Antonio Doradores» entre los años 1993 y 1994.

 

 

EL MISTERIO

La iconografía Humildad y Paciencia representa el momento anterior a la Crucifixión de Jesús. Tras la llegada a la cima del Gólgota, Jesucristo es despojado de sus vestiduras, es humillado de nuevo. Es aquí cuando aparece el momento que nos concierne, es decir, después de sus despojos, Cristo se sienta sobre una roca que había en el lugar a la espera de su sufrimiento final. A su alrededor los soldados se jugaban su túnica, mientras otros preparaban la cruz para clavarlo y alzarlo ante todo el pueblo. Jesús espera la muerte, desnudo y sólo, aunque en el arte se representa ataviado con el paño de pureza. Se trata de uno de los episodios más trágicos de la Pasión, reflejado esto en el propio rostro del Señor. No hay que confundir este tipo iconográfico con la del Ecce Homo, ya que es muy común esta confusión en algunos casos entre ambas, diferenciándolas en que el Ecce Homo siempre aparece representado con la clámide y la corona de espinas; mientras que en la de Humildad y Paciencia siempre nos los vamos a encontrar sentado, con la corona de espinas y el paño de pureza.

El Señor de la Humildad es acompañado por un sayón que sostiene la cruz y otro que agachado porta el martillo y los clavos para crucificarle, todo ello custodiado por un soldado romano que vigila que todo vaya según lo previsto por Pilato. Las tres imágenes son obra de nuestro hermano escultor  Antonio Gavira Alba, dos de ellas, el sayón que porta la cruz y el romano, realizadas en 1955 y 1957 respectivamente, y el sayón que porta el martillo y los clavos esculpido en 1993.

 

LOS LLAMADORES

El paso posee dos llamadores que van alternando en los años. Uno de alpaca sobredorada perteneciente al paso antiguo, y otro realizado en alpaca plateada por orfebrería «Andaluza» en 1992 con una gran «S», en donde dos costaleros sostienen el escudo de la Hermandad.